Picada no tan picada, con platos abundantes y sabrosos
Llegamos muy temprano 12:30, el lugar se llena. Pedimos dos platos que demoraron harto, pero nos avisaron de la demora y realmente valió la pena, un pulpo exquisito al vino y mariscos al pil pil, con ostiones calamares, camarones y muchas patas de jaiba, servidos en platos de greda a una temperatura que se mantuvo constante toda la comida. Con un menú para niños muy barato y contundente. Un siete para este restaurant/ picada. Totalmente recomendable. Excelente atención.